Olona se compromete a compensar los sobrecostes económicos producidos a los ganaderos por la presencia del lobo y el oso

EUROPA PRESS

  • El consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, se ha comprometido, este miércoles, a compensar a los ganaderos los sobrecostes económicos que se derivan de la presencia del lobo y el oso en las zonas donde desarrollan su actividad.

El consejero ha adoptado este compromiso durante su visita a la localidad oscense de Montanuy, en la Comarca de la Ribagorza. Aquí se ha reunido con la alcaldesa, Esther Cereza, los concejales del Ayuntamiento y los ganaderos afectados por el último ataque de oso ocurrido a finales del pasado mes de junio en el Valle de Castanesa. El objetivo del encuentro ha sido analizar la situación y las líneas de actuación frente a la presencia del plantígrado, ha informado el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.

"El motivo de esta visita es fundamentalmente escuchar, sabía que venía a un contexto complicado", ha señalado Olona, que ha explicado que los ganaderos le han trasladado su malestar y preocupación por la situación. "He tratado de ser empático con ellos, pero explicando la realidad de las cosas", ha apuntado el consejero.

Durante el encuentro, Olona ha admitido que la simple presencia del oso o del lobo genera unos sobrecostes económicos que hay que compensar y ha adquirido el compromiso de hacerlo.

"No hablamos de pagar unos animales muertos, hablamos de pagar esos sobrecostes, sabiendo que hay algunos que son impagables", ha explicado el consejero, que ha informado también de que se van a "financiar al cien por cien" medidas de protección, como vallados eléctricos o adquisición de mastines.

Olona ha comenzado la reunión anunciando la publicación en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), el pasado lunes, de la orden por la que se establecen las bases reguladoras de las subvenciones para la adaptación de la ganadería extensiva a los retos medioambientales y a los desafíos socioterritoriales. La convocatoria de las ayudas se publicará en las próximas semanas.

"Esto es lo que debemos hacer desde mi punto de vista, habilitar unas ayudas razonables, generosas y que no pasen por la continua puesta en duda de si los daños producidos son de osos o lobos, sino que la simple presencia de estos animales motive la concesión de una determinada ayuda", ha señalado.

LAS SUBVENCIONES

Las bases de la convocatoria establecen medidas que promueven el mantenimiento de la ganadería extensiva, en especial, en aquellas zonas con riesgo de sufrir ataques de oso y de lobo sobre el ganado.

Las subvenciones van a estar dirigidas a los titulares de explotaciones ganaderas extensivas de ganado menor -ovino y caprino-. Así, estarán destinadas a paliar sobrecostes derivados de las situaciones de riesgo provocadas por la presencia de estas especies y a la adopción de medidas de autoprotección.

Estas subvenciones tienen como objetivo la inversión por parte los titulares de las explotaciones para la mejora de las condiciones de seguridad del ganado, así como para adopción de técnicas de manejo que contribuyan a reducir el nivel de daños ocasionados por el oso pardo y el lobo.

Entre las medidas de seguridad que se pueden adoptar, las bases tienen en cuenta los vallados fijos o portátiles para el ganado, estos últimos siempre que vayan acompañados de sistemas de pastor eléctrico, o la adquisición de perros de raza mastín en cualquiera de sus variantes -montaña de los Pirineos, mastín del Pirineo, mastín español-.

Las subvenciones podrán llegar hasta el cien por cien del coste de actuación, con un máximo de 6.000 euros por titular y año en su conjunto. Además, cono incentivo para promover el mantenimiento de la actividad ganadera en estas zonas de riesgo, se ha establecido también una ayuda por explotación cuyo importe será de hasta 6 euros por cabeza, con un límite máximo subvencionable de 2.000 cabezas de más de un año de vida y un límite mínimo de 100 cabezas.

EN CONTRA DE LA REINTRODUCCIÓN

El consejero ha querido dejar claro también que no promueve la reintroducción ni de osos, ni de lobos en otros lugares, pero tampoco defiende la eliminación de estos animales que "inevitablemente" están llegando.

"Mi planteamiento es que la presencia de estos animales no puede ser a costa de los ganaderos, tienen que tener una ayuda aunque ellos la cuestionen y consideren que es insuficiente", ha resaltado.