La Obra Social de CAI renueva su ayuda a Cáritas Huesca con una aportación de 10.000 euros

EUROPA PRESS

La Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) ha renovado el convenio de colaboración que mantiene con Cáritas Diocesana de Huesca para reforzar la labor que lleva a cabo el taller de inserción ‘A todo trapo’, con una ayuda de 10.000 euros.

La Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) ha renovado el convenio de colaboración que mantiene con Cáritas Diocesana de Huesca para reforzar la labor que lleva a cabo el taller de inserción ‘A todo trapo’, con una ayuda de 10.000 euros.

Así, la entidad destinará 10.000 euros con el fin de que este taller, que cuenta con más de veinte años de historia, pueda mantener e, incluso, incrementar en los próximos meses su actividad en beneficio de personas en riesgo de exclusión social.

La directora de Cáritas Huesca, María Pilar Polo, y la directora de la Obra Social de Caja Inmaculada, María González, han formalizado esta colaboración en el transcurso de una visita que han realizado este viernes a las instalaciones de ‘A todo trapo’.

El taller, situado en una nave industrial del Polígono de Monzú, es la acción más significativa del programa de inserción laboral de Cáritas Huesca; una iniciativa que pretende apoyar los procesos individualizados de formación y acceso al empleo de las personas más vulnerables desde el trabajo de reciclaje y artesanía textil.

Cuenta con zonas de lavandería industrial, costura y plancha, así como con diversos almacenes. Actualmente, participan 15 mujeres que reciben formación y aprenden habilidades necesarias para acceder al mercado de trabajo. Al mismo tiempo, da empleo a cuatro trabajadores con contratos iniciales de inserción.

En el taller se tratan al año cien toneladas de ropa donada, más de 36.000 prendas se lavan, restauran, planchan y se envían a los puntos de venta ‘Trobada’ que Cáritas tiene en Huesca, Sariñena y Zaragoza. Otras 10.000 prendas más se reciclan y se entregan a personas sin recursos a través de los programas de acogida y personas sin hogar.

En los últimos años ‘A todo trapo’, con el apoyo de la Obra Social de Caja Inmaculada, ha diversificado sus actividades con dos talleres ocupacionales de restauración de juguetes y encuadernación, y un proyecto de elaboración de artesanías textiles con material reciclado —llamado ‘De corazón’—. En estos talleres participan 22 personas en desempleo.

Tanto las mujeres que se forman para el empleo como las que participan en el resto de talleres perciben una beca de asistencia que les permite afrontar la difícil situación económica que sufren, ha resaltado CAI en una nota de prensa.

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