Desarticulada una red de trata en Zaragoza que engañaba a mujeres para explotarlas sexualmente en pisos prostíbulo
La Policía Nacional ha desarticulado en Zaragoza una organización criminal dedicada a la trata de mujeres y a su explotación sexual en pisos prostíbulo de la capital aragonesa. En el operativo se ha logrado la liberación de ocho víctimas y la detención de siete personas, a las que se le imputan delitos de trata, prostitución coactiva, tráfico de drogas, coacciones y pertenencia a grupo criminal.
La investigación policial comenzó gracias a la denuncia de una de las víctimas, según ha detallado este lunes el cuerpo policial en un comunicado. Se descubrió que este grupo captaba a sus víctimas —la mayoría de origen colombiano y en situación de vulnerabilidad— ofreciéndoles falsas ofertas de empleo para trabajar en la hostelería y el cuidado de personas mayores en España.
Para ello, contaban con una persona de confianza en Colombia que se encargaba de localizar a estas mujeres, que debían cumplir también unas determinadas características físicas "que aseguraran mayores beneficios". La captadora, después de obtener la aceptación de las víctimas, proponía hacerse cargo de todos los gastos relacionados con el traslado, la tramitación del pasaporte, compra de los billetes y la reserva de hotel.
Pagaban 500 euros por vivir donde las explotaban
Cuando las víctimas llegaban a Zaragoza eran alojadas directamente en los pisos prostíbulo gestionados por la organización criminal, donde las obligaban a ejercer la prostitución. Los explotadores las exigían disponibilidad total para la realización de servicios sexuales, y no dudaban en amenazarlas y coaccionarlas para que aceptaran relaciones violentas y forzadas con los clientes.
Además, las víctimas eran controladas en todo momento por cámaras de videovigilancia, y cada una de ellas debía pagar al grupo criminal 500 euros mensuales en concepto de "alquiler" del piso donde eran explotadas, además del 50% del dinero obtenido en cada servicio realizado.
El control del entramado sobre las víctimas se estrechaba con la participación de las denominadas "mamis", una especie de encargadas de los pisos prostíbulo. Eran las responsables de trasladar e intercambiar a las víctimas entre los distintos pisos que controlaba la organización, con el objetivo de "aportar novedad a los clientes" e incrementar la clientela y los beneficios.
Obligadas a consumir cocaína
También obligaban a las víctimas a adquirir con su propio dinero ropa sugerente para realizar sesiones fotográficas con las que publicitar sus servicios en páginas de contactos en Internet. Además, estas mujeres eran las encargadas de adquirir, recibir y suministrar cocaína a los clientes y potenciadores sexuales, promoviendo también el consumo de drogas entre las víctimas para generar su dependencia y aumentar así las deudas con el grupo criminal.
Finalmente, la operación policial ha culminado con la liberación de ocho víctimas, la detención de siete implicados y el registro de cuatro pisos en la ciudad de Zaragoza en los que se ha intervenido dinero en efectivo, varias dosis de cocaína, material informático y diversa documentación relevante para la investigación.